La verdadera Magia es la Magia NaturalLa verdadera Magia o Magia Natural como se le conoce, es la magia que proviene de uno mismo como Absoluto. Magia significa obrar y toda proyección o la capacidad de permitir que las cosas se manifiesten, proviene de uno mismo como Absoluto. Somos quienes permitimos eternamente que tanto lo invisible como lo visible se manifieste como creación.
La Magia es también la sabiduría del conocimiento de la naturaleza, se refiere al conocimiento de nuestra naturaleza esencial y quien conoce su verdadera naturaleza, deviene sabio. Cuando me refiero a Magia Natural, esto no tiene nada que ver con la naturaleza y sus cuatro elementos (tierra, agua, aire y fuego). Me refiero a nuestra naturaleza misma y esencial que somos y siempre hemos sido y la capacidad de obrar o hacer maravillas, acorde a lo que somos. Significa que nuestra naturaleza es magia en sí, es mágica y a partir de ahí podemos obrar o hacer magia. La verdadera magia es uno mismo y toda nuestra sabiduría y poder como Absoluto. Esto último no tiene nada que ver con la hechicería, brujería o magias no naturales como Adivinaciones, Oráculos, Artes cabalísticas, Arte Notoria, Arte Paulina, Augurios y auspicios, Sortilegios, hechizos y encantamientos, maleficios, Necromancias, Piromancia, Aeromancia, Hidromancia y Geomancia (fuego, aire, agua, tierra) Magia dæmoniaca (que los griegos llamaban Goecia). De hecho la brujería y la hechicería estrictamente no es Magia, aunque utiliza muchos de sus elementos. La auténtica magia es aplicada, manifestada o proyectada por los verdaderos magos que a su vez, eran considerados taumaturgos (Taumaturgia) o “Hacedores de Maravillas” y esto está muy lejos de ser brujería o hechicería. Un auténtico mago que no es más que un sabio que sabe aplicar su poder, aunque sabe de hechizos, encantamientos y brujería (embrujos), (conoce todas las fórmulas y artilugios), no los aplica ya que su verdadero amor está por sobre todos sus deseos e intereses egoístas y egocentristas. El verdadero mago y su auténtica magia (la magia de uno mismo como Absoluto), no está interesado en embrujar o hechizar, ya que sus intereses están depositados en hacer el bien, guiar, amar y respetar por sobre todas las cosas todo lo que ha nacido de él mismo (creación) como manifestador. Cuando un individuo se reconoce como El Absoluto, también se reconoce como Mago y aunque posee y siempre ha poseído toda la potestad para aplicar la magia, no siempre lo hace o hay veces que la aplica involuntariamente a través de la espontaneidad y su fluidez natural. El mago es luz, es sabiduría, poder, beatitud, plenitud, alegría, radiación, amor, armonía y paz. Su principal proyección es la “Magia de la Luz” y esta, es proyectada por el mago u operador, en circunstancias o situaciones que se necesita. El verdadero mago carece de ego, es inocencia, simplicidad y transparencia y conoce toda su creación o manifestación, en un sentido para nada intelectual o intuitivo. Su magia es pura y verdadera, pudiendo llevar a cabo actos maravillosos como el de la invisibilidad, la teletransportación, levitación, transmutación de elementos o sus propios cuerpos. Para lograr tales maravillas precisa de tres importantes requisitos, estos a saber son: Deseo. Perseverancia. Dominio. En resumidas cuentas la humanidad está muy lejos aún de llegar a reconocer su naturaleza mágica y poder hacer magia como lo hacía un Jesus, un Ramalinga, Un Elías, un Babaji, entre otros. Sin embargo, es mi gran deseo el que la humanidad se reconozca como tal y volvamos a vivir la edad de Oro. Misael Godoy Booth.
1 Comentario
La iluminación espiritual no es lo que creesSiendo verdad que han existido muchas respuestas y diversas formas para justamente responder de la forma más precisa posible a esta pregunta, curiosamente, no hay respuesta que alcance o pueda satisfacer del todo a esta interrogante.
Sin embargo, me acercaré de la forma más completa posible para responder a esta tremenda pregunta. La Iluminación Espiritual en estos días ya no tiene nada de iluminación y menos de espiritual. Entonces, resulta en una pregunta y a su vez una idea completamente invertida. Es el principio luciferino porque ha sido enfatizado como un despertar a nivel personal (desarrollo personal) y dirigido hacia la cabeza y no hacia el corazón (nuestro centro) que es donde realmente debería estar centrada la vivencia en sí. Ahora para responder a esta gran pregunta solo puedo decir que la iluminación no es más que una vivencia atemporal y por lo mismo es instantánea. Esta vivencia en sí consiste en darnos cuenta de forma instantánea de los siguientes factores: No somos un individuo. No somos una persona. No somos ego. No somos un alma. No somos un espíritu. No somos una mente. No somos un pensamiento. No somos las emociones. No somos los sentimientos. No somos consciencia. No somos antes de la consciencia. No somos supra-consciencia. No somos un rayo de luz. No somos Dioses. No somos creadores o co-creadores. No somos salvadores. No somos Cristo. No somos la luz de gracia. No somos semilla estelar. No somos ni tenemos un origen estelar. No somos niños Índigo, cristal o arcoiris o lo que sea. No somos llamas gemelas y almas gemelas. No somos trabajadores de la luz. No somos portadores de la luz. No somos El Buda. No somos filósofos. No somos extraterrestres, ni terrestres. No somos Ángeles de la tierra. No somos el niño interior. No somos la Fuente. No somos energía. No somos vibración. No somos luz. No somos espirituales. No somos el observador. No hay nada ni nadie que ilumine. Simplemente no somos nada (neti, neti; ni esto, ni aquello) A simple vista estos factores basados en un rotundo y radical No nos llevarían a una tremenda decepción en comparación a lo que se cree y se piensa lo que es la iluminación en sí, sobre todo a través de las diversas corrientes, movimientos, tendencias modernistas y por excelencia la New Age. La iluminación es simplemente darnos cuenta que no somos nada de lo que he nombrado en la lista y que lo único que se puede vivir es lo Absoluto. En resumidas cuentas, somos El Absoluto. La iluminación es darnos cuenta que podemos resonar, vibrar o alinearnos con nosotros mismos (Absoluto). Pero, lo más fundamental y esencial es darnos cuenta que podemos vivir todo esto sin la creencia de que somos algo de todo esto (me refiero a cada ítem en la lista anterior). Cualquier persona o individuo puede decir que está vibrando o en sintonía consigo mismo, pero mientras este el personaje/ego aún presente, es justamente este personaje el que podría creer que tiene que resonar o alinearse consigo mismo (personaje/ego). Esto significa que este darse cuenta implicaría una resonancia con lo que realmente somos (Absoluto) y a su vez una disponibilidad para que esta resonancia con uno mismo sea constante y por ende se manifieste una transformación y transmutación de nuestros vehículos (ascensión). Darnos cuenta que no somos ni esto ni aquello, neti-neti como dicen los Hindúes. Porque al fin y al cabo, no existe un otro y jamás existirá. Somos eso, somos Uno y lo Único y nada más que eso… Un simple Es. Pero para vivir este simple Es, tal como dice la palabra, hay que vivirlo. No basta con saberlo intelectualmente, teóricamente o a través de una experiencia efímera y fugaz o una enseñanza, por más elevada que esta sea. Hay que vivir este darnos cuenta o impactante acontecimiento. Hay que vivir este reconocimiento de nuestra verdadera y auténtica naturaleza Absoluta. Vivir esta loable admiración por uno mismo eternamente. ¿Por qué no somos ni esto, ni aquello? Porque lo único que existe es lo que somos. El resto de las cosas que aparentemente podemos ver, oír, tocar, sentir, no existen como tal, son solo pensamientos, ideas, creencias de que son algo real, conceptos basados en la aparente dualidad que nos llevan a pensar y creer que existe un otro o una cosa con la cual podríamos relacionarnos o interactuar. La iluminación es darnos cuenta que el que se alinea consigo mismo es El mismo (truco) y que en resumidas cuentas es El Absoluto quien permite todo, incluso el viejo truco de la dualidad (sujeto-objeto). Misael Godoy Booth. Un acontecimiento totalLo Absoluto es un concepto que se define como total e independiente de lo demás. La etimología de la palabra añade Ab que significa separación y el verbo latino solvo que significa soltar/desvincular. Cualquier realidad, en tanto que pueda ser considerada como tal, ha de tener una relación de dependencia conocida o desconocida. Lo Absoluto se refiere a lo separado (ab-suelto) de toda existencia o de su posibilidad.
Lo Absoluto como "concepto en realidad" El Absoluto ha de ser real; con independencia de ser o no ser conocido. De otro modo el absoluto estaría condicionado a la subjetividad de un conocimiento y sería contradictorio. Sin embargo, la propia atribuición de ser real condiciona a priori una noción; se trata por tanto de un argumento falaz en el que se está sujetando arbitrariamente lo absoluto a la noción de ser o de realidad y no ha de estar sujeto tampoco a nociones. En este sentido, en filosofía resulta impropia una definición para el absoluto; y al tratar de hacerlo realmente postulamos nuestra propia idea ante lo ignoto, por ejemplo: El ser real es un dominio en lo absoluto. Diversas formas de concebir lo absoluto en la realidad
Algunas experiencias contemplativas y artísticas acercan a dicha experiencia de lo absoluto, pero siempre bajo el prisma de la inexpresabilidad conceptual y siempre como experiencia subjetiva. En el uroboros se simboliza ésta imposibilidad como sujeto ante la transformación del devenir (según Platón) cuyo objeto es la integración y desintegración permanente de los fenómenos. No obstante, el pensamiento tradicional ha considerado posible la comprensión de lo Absoluto, o al menos la posibilidad de hablar con sentido del mismo, como hemos visto en el apartado anterior. En la actualidad, se tiende a pensar que no es posible hablar con sentido de lo Absoluto:
Wikipedia®. Nota de Misael Godoy: como complemento a este artículo, solo puedo decir que para saber lo que realmente somos (Absoluto), hay que vivirlo, de otra forma sería imposible. La meditación no es lo que tu creesLa meditación tal como se lleva a cabo hoy en la actualidad, es inexacta.
Primero porque se sostiene al ego con y a través de la postura, haciendo que este, esté presente todo el tiempo que la persona está meditando. Segundo, el practicante no le da continuidad al estado meditativo de por vida y solo practica por cortos periodos fomentando el ego y el acostumbramiento en él, en vez de cortar con el hábito del personaje/ego a través del total abandono del mismo, para permitir que la Verdad o Vacío se exprese libremente. También hay que considerar que la meditación no es iluminación y está muy lejos de llevarte a ella. La meditación es iluminación invertida y estereotipada, es una mímica de la verdad. La meditación sólo puede proporcionar experiencias efímeras y fugaces, pero jamás una vivencia constante y sonante. La meditación no es vivir lo que realmente eres, es artificial y alimenta la conexión con tu bajo astral. La meditación no se trata de... No se trata de una técnica, no se trata de meditación alguna, no se trata de un sistema meditativo o un sistema de fórmulas que se puedan aplicar, tampoco se trata de una práctica aunque la llamemos de esa forma. No se trata de fórmulas mágicas, tampoco se trata de entonar un mantra, o adoptar una posición determinada como un mudra o algo por el estilo. No se trata de reverenciar a alguien o ser devoto de una entidad en particular, tampoco se trata de dejar de hacer o hacer demasiado. No se trata de un sentimentalismo humano, servicio al prójimo como se ha venido creyendo y menos en una filosofía de vida como muchos lo creen. No se trata de intelecto, razonamiento alguno o ser un gran Erudito. Tampoco se trata esoterismo, ocultismo o contacto con seres de otros mundos. ¿Entonces de qué se trata? Se trata de estar disponibles a la luz a través de una entrega total para que la luz limpie y purifique todo lo que tenga que ser limpiado y purificado. Se trata de abandonar tu cuerpo, tu alma, tu espíritu, tu energía, tus vibraciones, tus pensamientos, emociones y sentimientos. Se trata de abandonar toda preocupación, toda creencia, toda atadura y todo apego. Se trata de abandonar todo pensamiento, desde el punto de vista psicológico para que tal abandono te mantenga disponible a la luz de gracia. La luz de gracia es el único camino de la Verdad y la transparencia por excelencia ante todo y no una técnica o postura determinada. Misael Godoy Booth. La iluminación esta al alcance de todosProbablemente has escuchado sobre la iluminación espiritual y lo primero que se te vino a la cabeza, en ese momento, fue un monje budista meditando en la posición de loto. Pero esta es una percepción bastante equívoca de la iluminación.
Posiblemente has escuchado que la iluminación es para unos pocos, que es muy difícil de alcanzar y solo unos pocos elegidos pueden acceder a esta maravillosa revelación ¿cierto?. Desde ya te digo que no es así y hoy en esta nota te diré el porqué. Primero que todo la iluminación es instantánea. La idea de que se necesita aprendizaje, enseñanzas o un proceso por el cual pasar no existe, estas son solo ideas y creencias. En el momento en que la iluminación sucede, el concepto de tiempo y espacio desaparece llevándote a un no estado absoluto. Si este no estado es definitivo, la iluminación es una vivencia. Al contrario, este estado sin estado es simplemente otra experiencia cuando se llega a experimentar en repetidas ocasiones. Para acceder a iluminarnos no existe una fórmula precisa o una manera especial para acceder, se puede vivir este momento instantáneo con el solo hecho de estar disponibles y dejar que suceda. Existen diversos puntos a ser tomados en cuenta, estos a saber son: Ha de existir un deseo ferviente y un gran interés por este camino de vida. El individuo en cuestión ha de tener la entereza suficiente para decidir la iluminación en sí. Tener la capacidad de darse cuenta de este no - estado y permitirse a sí mismo madurar en la iluminación cada vez de forma más profunda. Dejar que este no estado y su sensación de “Nada” se prolongue y expanda todo el tiempo posible o de forma definitiva. Al menos que el individuo venga listo y preparado quizás no necesite algunos de estos cuatro puntos anteriores. ¿Por qué medios se puede vivir la iluminación? Han existido diversas corrientes, maestros, incluso existen distintas vías, una más directas que otras, que nos preparan el camino a través de un proceso de desarrollo y evolución. Sin embargo, este no - estado se puede vivir de distintas formas. Para algunos es a través de largas horas de abandono del cuerpo, la personalidad y el ego. Para otros en solitario o frente a mucha gente, otros de forma fulminante experimentaran esta sensación, otros simplemente con un darse cuenta o una poderosa toma de conciencia de su Naturaleza Esencial, otros a través de un verdadero stop, algunos a través de la conexión con su interior. Algunos sentirán un jalón hacia lo alto de la cabeza como una especie de alineamiento, otros a través de la inmovilidad. Algunos llevando a cabo una actividad por así decirlo placentera y quien sabe. Es posible que existan muchas formas más de iluminarnos y hoy más que nunca que las cosas son mucho más fáciles a nivel vibracional. Esto quiere decir que no es necesario seguir una doctrina o corriente determinada, menos apegarnos a un sistema, técnica o método alguno salvo que el individuo así lo haya decidido. Es muy importante tomar en cuenta la libertad que tenemos frente a nosotros y lo libre que somos. Cada Maestro sea de la corriente que sea ha brindado su experiencia, sus enseñanzas y ha demostrado con su ejemplo que la iluminación es posible. Pero no todos dejaron en claro que este es un camino de vida y quien se decide es para siempre, ya que no hay vuelta atrás. ¿Por qué es un camino de vida? La mayoría de las personas no saben lo que es la iluminación. Hay que tomar en cuenta que es un término bastante moderno utilizado por los ingleses, en la antigüedad este concepto no existía y nunca se había usado menos aún por Yoguis, Vedantas, Avatares y seres por el estilo. Ahora, lo que las personas no saben es que este es un “camino de vida”, significando que en el momento que la persona se lanza al vacío de su propia naturaleza esencial, a partir de ahí esa sensación de ligereza, neutralidad y profundidad ha de ser sostenida, por así decirlo, de forma permanente. En el momento que esto se vuelve permanente se transforma en una vivencia y como todo lo que se vive es a diario y para siempre, pasaría a ser un verdadero camino de vida. ¿Por qué la iluminación es un no - estado? Muchos creen que esta vivencia es un estado que debería por obligación traer paz, felicidad, amor, y entre otras bondades muy mal interpretadas. La verdad es que no trae nada de esto; como dicen los Hindúes, “Neti, neti”, o sea “ni esto, ni aquello”. La verdadera iluminación es un no - estado absoluto, no un mercado de oportunidades glamurosas. Sin embargo, es el fin de todo sufrimiento y todo dolor. ¿Por qué los ingleses adoptaron este concepto? La mejor forma de representar a un ser genuinamente iluminado y sabio por excelencia es a través de este término. En el momento en que un individuo se ilumina, se ilumina; valga la redundancia, ya que lo que se manifiesta es solo luz y lo que irradia es más de lo mismo. Por eso el término iluminación, o te iluminas que es como decir te enciendes he irradias, luz y calor. ¿Para iluminarnos tenemos que abandonar todo? Antiguamente abandonar todos nuestros bienes, nuestra familia, incluso lo que llevábamos puesto era necesario, hoy por hoy, no es así. Ya sea que estés gozando en abundancia material o seas pobre como una rata, te encuentres solo o acompañado no es un problema. Algunos lo vivirán de una u otra forma, cada caso es particular. ¿Existen obstáculos para iluminarnos? La iluminación en sí es algo simple y fácil de vivir. Sin embargo, podemos dar a conocer algunos de los principales obstáculos que pueden impedir, o mejor dicho retrasar este acontecimiento. Miedos y temores. Hábitos y costumbres. Ignorancia y falta de interés por salir de la ignorancia. Apego o exceso de identificación con la imagen del Yo, con los pensamientos, placeres y demases. Conclusión: Como conclusión puedo decir que la iluminación o reconocimiento de nuestra verdadera naturaleza es lo más fácil que pueda existir; es algo simple y puede ser vivido por cualquier individuo en esta tierra. Está al alcance de todos porque es nuestra naturaleza, es lo que somos. En resumidas cuentas, para saber de qué se trata hay que vivirlo, no puede ser de otra forma. Curiosamente, conozco un atajo directo para vivir la iluminación y si de verdad te interesa, te puedo enseñar. Misael Godoy Booth. |
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