El Servicio Como CualidadMucho se ha hablado del servicio, del ayudar a los demás, del extender la mano al necesitado y al afligido. Algunos llevan a cabo este tipo de acciones para quedar bien, para obtener algo a cambio, otros, porque sienten el pesar de su prójimo, algunos porque de esa forma lo planearon antes de encarnar, otras personas porque pasaron por una experiencia complicada de mucho sufrimiento, que los llevo a un cierto despertar y gracias a eso han optado por la vía del servicio, que curiosamente les ayudara a minimizar su karma. Sea como sea el caso en particular en cada persona de este mundo, el servicio a través de una observación más bien del tipo espiritual y por una cultura impuesta a través de las religiones ha sido imprescindible para el avance y evolución de esta pobre y dolida humanidad. Pero si deseamos entender con mayor precisión que significa servir, ayudar, no basta con creer que en ayudar al nuestro prójimo lo es todo. Curiosamente tanto las religiones, sobre todo la Católica y todos sus secuaces, incluyendo porque no a los Arcontes, han hecho del servicio un concepto mal oliente y degradado, hasta el punto de hacer sentir a la humanidad que es una obligación perpetua, el tener que ayudar con sacrificio y aflicción al resto de los humanos. Este antiguo y viejo enfoque respecto al servicio, es una mirada añeja, poco eficaz y que ha traído grandes desilusiones y pesar para aquellos que no han comprendido del todo lo que realmente significa servir a nuestro prójimo. De este enfoque ha nacido el sacrificio, la aflicción, el dolor, el sufrimiento, el victimismo, el verdugo y el salvador y lo más triste, es que la humanidad se la ha creído a pies y juntillas y ha hecho del acto de ayudar a los demás, una miserable imagen donde la victima precisa de forma constante de un salvador externo y es una historia de nunca acabar. El servicio a los demás, no puede ser hecho con aflicción y sacrificio, no puede ser hecho desde la carencia sea desde lo material si se desea ayudar en ese sentido o desde lo psicológico y espiritual, si se desea ayudar en este otro aspecto. El servicio a nuestro prójimo ha de ser hecho con alegría, paz, felicidad y liviandad, con la abundancia necesaria sea material, psicología y espiritual o de ambas partes, para sostener un equilibrio, en lo posible. La Iglesia Católica ha difundido de forma errada el hecho de servir a los demás, fomentando prácticamente la esclavitud respecto a este tipo de acciones… Claro está, que a ellos les ha convenido y les sigue conviniendo el fomentar este tipo de ideologías y conceptos, porque ellos son los que más se benefician, en base al servicio en forma de caridad y sacrificio. La humanidad se ha mantenido en un tremendo lastre lleno de miseria y por ningún motivo hacia un impulso para vivir la verdadera luz, que radica en la vía del corazón por el corazón o sea La Esencia. No estoy fomentando el hecho de no servir y ayudar a quienes lo necesitan y si está en ti ayudar, si puedes ayudar dentro de tus posibilidades, adelante, con mayor razón si la luz te coloca en ese camino, porque no, pero creer (creencia), que tienes que servir, que tienes que ser el líder, el salvador de no sé qué, ese es otro cuento y muy viejo por lo cierto. Las personas han de liberarse de la creencia, victima – verdugo – salvador, porque no sirve de nada, no ayuda en nada, no aporta nada, solo trae miseria en todos los aspectos, es más, el verdadero y autentico servicio está en esa especie de empoderamiento, cuando nos conocemos de verdad y la luz sale a flote, la paz emanada del corazón en todas las direcciones, es ahí donde la mayor de las ayudas se manifiesta de forma natural. Que sucedería si las personas dejan de ser víctimas, dejan de buscar salvadores y se posicionan en conexión con su interior, que sucedería. Simple, las víctimas, los verdugos y los salvadores, no tendrían ningún sentido y el planeta entero junto a todas sus especies y los distintos reinos, elevarían su vibración, porque los humanos, serían personas iluminadas, en el verdadero y autentico sentido de la iluminación, no ese concepto fantasioso que más que liberar apega a las personas aún más a las formas efímeras. Entonces si sois llamados a ayudar a servir a la humanidad de forma espontánea o por que la verdadera luz así lo requiere, entonces adelante, en caso contrario olvídalo, pero recuerda, que el mayor servicio, es la vía del corazón por el corazón. No hay más, no hay menos, ya que solo puedes ayudar de manera autentica, cuando tú te alinees con la luz, cuando tú te des cuenta que eres luz y dejes de poner resistencia con tu famoso ego, justamente a ese caudal de luz. “Se” y simplemente “Se”. Paz y Luz por siempre. Misael Godoy Booth.
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