Ego

La exaltación del ego

La exaltación del ego, algo que se puede observar a cada momento, instante en instante.
 
¿A qué me refiero con la exaltación del ego?
 
Le daré un buen ejemplo:
 
Tenía que viajar de una comuna a otra en el bus, subí (cerca de las 15:15 hrs. Chile), me senté en uno de los últimos asientos hacia la ventana y mi mochila la coloque a mi lado, por tal motivo el asiento estaba supuestamente ocupado.
 
Subieron tres escolares adolescentes, uno de ellos miro la mochila y se incomodó, pero no era porque deseaba sentarse, había algo más ahí, no solo era su ego, había algo más.
 
Entonces me di cuenta de todo el proceso y lo mire, ya que él me miraba de manera molesta e insistente.
 
Pero no se atrevió a decir nada.
 
Entonces me di cuenta que al lado de el a mano izquierda estaba una entidad muy oscura y densa, como unos dos metros de altura, estaba fomentando a este muchacho a intentar incomodar mi supuesta personalidad (lo digo de esa forma porque no soy la personalidad, soy la Esencia, igual que tú).
 
Entonces dirigí mi atención a la entidad y le dije que no sacaba nada con hacer eso, porque la podría atormentar con la llamada de los cuatro Arcángeles, que se colocan en las cuatro esquinas en espacios cerrados, me dijo que no estaba haciendo nada (primera mentira), pero le dije, estas manipulando el ego del muchacho no es correcto aunque esa sea tu naturaleza y tu función.
 
Por tal motivo dejaras de hacerlo en nombre de los cuatro y la entidad comenzó a sentirse presionada y horrorizada, entonces cuando dejo de hacerlo el muchacho se sentó al rato después y se quedó tranquilo, (estamos hablando de un exorcismo silencioso).
 
Luego después subió un hombre cerca de unos 50 años también miro la mochila y se molestó estando la mitad del bus vacío con asientos disponibles.
 
Entonces ¿qué es lo que sucede?, muy simple. Estamos pasando por una etapa donde el ejercer nuestros derechos humanos y el sabor por la justicia escandaliza o sobre exalta más que ayuda.
 
Tengo derecho a opinar, tiene que haber justicia, no más por esto y así sucesivamente.
 
Cuando un hombre daña a una mujer surge el lado femenino reclamando justicia, está muy bien porque no se trata de no hacer nada para mejorar esta sociedad, pero la pregunta es:
 
¿De qué forma?, ¿Por qué proceder con más violencia de la que ya existe?, ¿La actitud de un ego exaltado por el horror de las cosas que están sucediendo?.
 
El problema es que tanto el ego y las entidades negativas detrás del personaje que hace daño más el ego y las entidades manipuladoras y nefastas detrás de las mujeres o de quien sea que reclama por justicia.
 
Las personas en general no se dan cuenta de estos detalles, sin embargo es una realidad tan palpable como todo lo que puedes tocar con tus propias manos.
 
El ego es traicionero y la culpa no es de las entidades, no podemos responsabilizar a estos seres invisibles a nuestros ojos por estos desmanes, tampoco responsabilizar al ego y librarnos de toda culpa.
 
El problema existe en donde colocas tu atención, con quien o que te identificas, con esos pensamientos de víctima, de ansiedad, rabia, ira, incomodidad, ganas de matar o dañar a quien te hizo mal o a quienes hicieron daño a otros.
 
Si de verdad deseamos que estas cosas terminen no basta con la justicia, con el escandalo o la exaltación.
 
Debemos comenzar por nosotros, por ser más humildes, más sencillos, simples de corazón, bondadosos y conscientes en todo momento, porque si aplicas más violencia a la violencia, entonces el tal efecto domino seguirá en pie, convirtiendo la sociedad humana en un desastre de incertidumbre e inestabilidad psicológica.
 
Misael Godoy Booth.